Rainer Werner Fassbinder
ARTÍCULOS Y DOCUMENTOS
LAS MUJERES DE FASSBINDER
Las mujeres de Fassbinder (1). Transcripción del documental italiano dirigido por Alessandro Colizzi y Silvia Cossu, producido en 1997 por Daedalus Film en asociación con la RAI y distribuido con la ayuda del Programa Media de la Unión Europea. Colaboradores: Peter Berling, Bernardo Bertolucci, Hannah Schygulla, Liliana Cavani, Giovanni Spagnoletti y Dacia Maraini. Citas de Rainer Werner Fassbinder y Douglas Sirk.
CITA DE DOUGLAS SIRK: Rainer Werner Fassbinder ha muerto. Hoy he perdido a un amigo y Alemania ha perdido a un genio. Su energía creativa y su vitalidad parecían indestructibles. Un constante flujo de películas y obras. Recuerdo el día en que conocí a Fassbinder hace doce años. Lugano estaba cubierto de nieve cuando un grupo de jóvenes alemanes se dirigieron hacia mi puerta y él se presentó: "Aquí estamos, Rainer Werner Fassbinder y un par de amigos". Mi mujer y yo conservamos recuerdos inolvidables de las horas que siguieron. Hablamos de Arte y Literatura, de Teatro y Cine, hasta altas horas de la noche. Yo empecé a hablar de teatro clásico español y mencioné la extraordinaria productividad de Calderón de la Barca y Lope de Vega. Rainer de repente dijo: "Me gustaría ser tan prolífico como ellos". Por lo que sabemos, sus palabras no fueron solo una expresión de deseo. Este director de 37 años de edad nos ha dejado una increíble herencia de más de cuarenta películas. Pero su talento creativo, sin precedentes en la historia del cine, no encontró inmediatamente la aprobación que merecía. Las películas de Fassbinder se han considerado polémicas durante mucho tiempo y espero que sigan siendo consideradas así en el futuro porque solo algo que puede sobrevivir al antagonismo tiene la fuerza de durar en el tiempo.
Rainer Werner Fassbinder murió en 1982. Muchas de sus películas siguen siendo desconocidas para el público italiano. Fue una de las figuras principales junto con Wenders, Herzog y Schlöndorff, responsables de la popularidad del cine alemán en la escena internacional de los setenta, pero Rainer se distinguió rápidamente por la fuerte corriente provocativa que subyacía en su obra y el escándalo que rodeaba a sus elecciones artísticas y a su vida privada. Declarado homosexual, anarquista, apasionado y violento crítico de los valores públicos, Fassbinder utilizó sus películas como si fuesen un escarpelo para diseccionar sin piedad los defectos de la sociedad contemporánea. Desde la extraordinaria complejidad de su obra lo que aparece como tema de inspiración sin lugar a dudas es la figura femenina. Si uno tiene en cuenta los nombres de los personajes femeninos de sus películas, María Braun, Veronica Voss, Effi Briest, Petra von Kant, Lola, Martha y Lili Marleen, podemos llegar a la conclusión de que el mundo femenino, tal y como lo veía él, es a la vez increíblemente interesante y heterogéneo.
Margit Carstensen es Petra von Kant
SPAGNOLETTI: ¿Cinco adjetivos para definir a Fassbinder?... Lunático, irreverente, burlón, malicioso, generoso.
BERLING: Ambiguo, desconfiado, desesperado.
SPAGNOLETTI: Su cine se podría describir como suave, poderoso, agresivo, inteligente, con los pies en la tierra.
CAVANI: Yo diría que es denso, realmente sombrío.
BERLING: Escribía los guiones sin pensar, sin corregir hasta el final, y uno lo puede ver, es un trabajo duro, pero en su globalidad algo de esta época llega hasta mí. Es como una voz que normalmente no se oye.
BERTOLUCCI: Todos los cineastas de aquella época queríamos comunicar, tener un público. Existía el temor de invertir en emociones y sentimientos y luego desilusionarnos al no encontrar el público adecuado. Así que nos reprimía el encontrar ese público, de modo que era un cine unilateral, un cine de expresión, no de comunicación. Fassbinder representa el tránsito de la expresión a la comunicación, era un gran comunicador. Sus películas, especialmente las últimas, buscaban una relación de amor con el público; todas sus películas tienen una corriente sensual patente. Cuando las veo siento que dicen Soy tuya, ámame.
Un cine que se compromete a expresar el horror de las relaciones basadas en la violencia y la prevaricación, en las que el amor -como se expresa en el título de una de sus películas- es más frío que la muerte. Para Fassbinder, la esclavitud significaba la explotación, y la dominación era la técnica utilizada para mantener esa esclavitud. Esa era la regla general, una regla que condiciona y que se extiende a las relaciones en todos los sectores de la sociedad, tanto en lo público como en lo privado, llegando hasta las relaciones más íntimas, las relaciones de amor.
SCHYGULLA: Creo que la frase que más se le adapta, la gran verdad, es la frase... no me lo puedo creer... ahora no me acuerdo... la frase de Oscar Wilde: Cada hombre mata el amor que ama.
Por una parte, tenemos a un director comprometido que se dedicó a describir las condiciones de vida de los menos privilegiados y a abordar el problema de la discriminación. Por otra parte, tenemos una serie absurda de acusaciones que incluyen la misoginia, el racismo e incluso el criptonazismo. El tabú que rodeaba a la intocabilidad de los oprimidos, hipócritamente instigado por la propia gente que les habían dejado encerrados en sus ghettos, no le interesaba. Estaba más interesado en la cuestión de la realidad social y humana en toda su complejidad, excediendo los límites de las categorizaciones simplistas. Nunca representaba a las mujeres con el estereotipo del bello objeto amoroso, sino que las presentó como seres humanos hambrientos de venganza, de tener su propio lugar en la sociedad, preparadas para usar cualquier medio a su alcance y así obtener lo que quieren.
Hanna Schygulla es Effi Briest
BERLING: Nunca vio a las mujeres como a un grupo minoritario porque básicamente era homosexual. Ponía a la mujer en un pedestal, como un monumento, como un ángel. Especialmente utilizaba a Hanna Schygulla de esta forma. Era su Marlene Dietrich, tenía que ser bella y adorada. Era la gran estrella.
CITA DE FASSBINDER: Las mujeres, como los demás miembros oprimidos de la sociedad, tienen que realizar acciones bajas e inmorales para sobrevivir, lo que explica el tipo de opresión a que están sometidas.
BERTOLUCCI: No sé quién le acusó de misógino, porque es uno de los directores que más amó a las mujeres. Las conocía profundamente e incluso conseguía mostrar la belleza de sus patrones de comportamiento inesperados, lo que sin duda es el resultado de un profundo sentido de la libertad que generalmente forma parte de la naturaleza de la mujer.
CAVANI: No creo que quisiera describir a la mujer en esos términos. Quería a través de ellas describir la situación de su país (en referencia a la trilogía compuesta por El matrimonio de Maria Braun, Lola y La ansiedad de Veronika Voss). La palabra Alemania significa mucho más: Es la Tierra Madre, que significa Madre en un sentido más complejo, así que no se puede hablar de misoginia, puesto que él narraba la historia de una mujer llamada Alemania que había sido destrozada. Las mujeres eran un emblema para él. Así que no hay razón para acusarlo de misógino solo porque era homosexual.
SCHYGULLA: No creo que a Fassbinder le gustara vivir en un mundo sin mujeres, y eso es para mí lo que significa la misoginia. Él sentía ternura por las mujeres, pero también era capaz de desarrollar ferocidad hacia ellas.
En una sociedad en la que el comportamiento se ve influido por los estereotipos, el papel social de un individuo no deja mucho sitio a la distinción. Esto conduce a la banalidad y previsibilidad del comportamiento de los hombres. El código de la sociedad es considerado representativo de supremos e inflexibles valores. Incluso el amor debía ocupar un segundo lugar.
CITA DE FASSBINDER: Los hombres no crean personajes cinematográficos interesantes porque hacen siempre lo que creen que tienen que hacer. Mientras que las mujeres son frecuentemente capaces de hacer lo imprevisto. El cine para mí es, por encima de todo, una cuestión de imaginación. Ojalá la gente se diera cuenta de que la necesidad del antihéroe es mucho mayor que la del llamado héroe. Esto es muy difícil de plasmar en una película, pero de cualquier modo tengo que intentarlo porque los héroes y las figuras heroicas no me interesan en absoluto.
BERLING: Fassbinder no quería ser realista, pero lo era con una enorme cantidad de poesía e imaginación.
MARAINI: El lenguaje que utiliza, el modo de ver la realidad, es extremadamente detallista pero distorsionado. Es la fórmula de todos los artistas expresionistas y desde luego él era un expresionista, así que veía las cosas de forma distorsionada. Lo que vemos en su obra es un reflejo de la realidad.
BERTOLUCCI: La credibilidad de un personaje, de un lugar o de una luz va mucho más allá que la impresión inmediata, y por eso creo que Fassbinder se inclinó más hacia el melodrama, alejándose de la cualidad ligeramente documentalista de sus primeras películas. Quería un cine basado en la vida real y que se concentrara en la realidad de las cosas, en toda su complejidad, más que en una impresión inmediata.
SPAGNOLETTI: El realismo es un intento de estilizar las cosas reales. Fassbinder quería ser un realista y no un naturalista, pero ningún director quiere ser un naturalista. El problema es que lo son.
CAVANI: ¿Qué debería plasmar el cine? ¿Quién sabe lo que debería expresar? Lo maravilloso del cine es que uno puede expresar lo que quiera. ¿Es esa realidad la repetición innecesaria de la realidad?... No lo sé.
BERLING: Creo que cuando una persona quiere crear arte ya empieza por mal camino.
SPAGNOLETTI: Fassbinder se consideraba como un cineasta popular y dirigía sus películas a la sociedad de consumo. Hacía una o dos películas al año, reinvertía el capital de una película en otra, de modo que no pensaba que su trabajo fuera una obra de arte.
BERTOLUCCI: Creo que Fassbinder es el ejemplo de alguien que hace una película tras otra, luego pasa el tiempo y cuando llega el momento de hacer otra película ya no eres la misma persona. Eres otra. Es un continuo proceso de crecimiento, un continuo proceso cinematográfico.
El matrimonio de Maria Braun es, sin lugar a dudas, una de las películas más maravillosas de Fassbinder. Una obra magnífica y compleja, llena de ideas, que le confirmó a su maestro el éxito y la popularidad en Europa y Estados Unidos que hasta entonces se le había negado.
Hanna Schygulla es Maria Braun
SCHYGULLA: Con Maria Braun fue diferente, fue lo contrario. Fassbinder veía el personaje con admiración, encontró a la heroína como alguien que rechaza el compromiso, que busca lo absoluto y que lo lleva al máximo de su capacidad. En lugar de eso, yo la veía como una víctima de lo absoluto. Me pareció que era una forma de caminar próxima a la vida y a él le encantaba esa forma de proceder como por una línea, sin ninguna curva interior.
BERLING: No fue una película planeada, fue una película por azar. Recuerdo que yo estaba preparando Berlin Alexanderplatz. Era noviembre y yo tenía un plan de trabajo: todas las paredes estaban cubiertas, cincuenta y dos semanas, un año... y yo dije a Rainer que podíamos empezar en julio, y él dijo "genial, así puedo hacer una película" y yo le dije "estás loco".
CAVANI: Yo formaba parte del jurado en el Festival de Berlin. La película se presentó allí. Me gustó mucho, era muy interesante. Pensé que el jurado querría darle un premio, que había gustado a la mayoría de los miembros, pero cuando llegó el momento solo Julie Christie y yo la defendimos. Solo conseguimos que concedieran a Hanna Schygulla el premio a la Mejor Actriz, pero la película no se llevó nada. Era absolutamente la mejor y la más interesante, pero había mucha hostilidad hacia Fassbinder y la película, que era sobre Alemania durante el período después de la Segunda Guerra Mundial.
SPAGNOLETTI (refiriéndose a la trilogía sobre la Alemania post-hitleriana El matrimonio de Maria Braun, Lola y La ansiedad de Veronika Voss): Fassbinder ha llevado la Historia al cine. De alguna forma se las arregló para reconstruir la identidad alemana y lo que eso conlleva. Era la nación más desastrosa y afectada por los conflictos de este siglo, por lo que había engendrado: dos guerras mundiales, el Holocausto y demás. Los alemanes habían olvidado su historia y las películas de Fassbinder les obligaban a enfrentarse con ella.
CAVANI: Creo que era lo más provocador que podía hacer en una época en la que los alemanes querían borrar y lavar los muros. En lugar de eso él les obligó a mirar los muros y las pintadas que había sobre ellos como si fueran los muros de una prisión. Quería escarbar, llegar hasta la piedra y entonces quizás volver a empezar.
CITA DE FASSBINDER: Yo no describo la Historia de forma fatalista, como un individuo que es capaz de manipular su propia realidad y después de todo es responsable de la Historia así como lo es de la realidad política en la que vive, aunque solo pretenda ser un testigo y una víctima del destino.
SCHYGULLA (refiriéndose a una escena de Maria Braun en la que aparece con Fassbinder, haciendo éste de contrabandista): Al final de la escena, Fassbinder tuvo un gesto inolvidable. Me cogió la mano, me miró de una cierta manera y me dijo "Buena suerte". Nunca lo olvidaré. Recuerdo que esto iba más allá de la película, tenía que ver con nuestra amistad. Quiero decir que él era responsable de mi lanzamiento y de darme a conocer. Todavía sigo viviendo de la fama que logré con sus películas.